Las peculiaridades de la medicina en España son algo para envidiar. El sistema sanitario español es uno de los mejores del mundo, ya que el país ocupa el cuarto lugar en el ranking de la OMS. Según la constitución, todos los ciudadanos españoles, en igualdad de accesibilidad, tienen derecho a recibir servicios médicos, incluidos servicios preventivos, curativos y de rehabilitación.

Los pacientes pueden recibir atención médica gratuita en cualquier región del país. En cada distrito administrativo de España, hay un hospital estatal obligatorio (al menos uno), equipado con todo el equipamiento moderno necesario, y se selecciona inmediatamente personal altamente calificado.

Una característica de la asistencia sanitaria española es la descentralización de la gestión y la financiación. Las principales funciones de atención médica están asignadas a las autoridades regionales del país. Las autoridades centrales, según el tamaño de la población y otros factores, asignan una determinada subvención a cada una de las 17 regiones. Las autoridades regionales determinan de forma independiente cómo gastar los fondos. También en las regiones, si es necesario, es posible utilizar su propio presupuesto además de la subvención general recibida.


La responsabilidad del seguro médico estatal obligatorio recae en el nivel regional. La compañía de seguros cubre casi todos los servicios médicos, tanto en la clínica ambulatoria como en el hospital. La cirugía estética y el seguro de salud mental no están cubiertos. Con respecto a los medicamentos, el paciente debe pagar alrededor del 40% del costo de los medicamentos recetados después del alta hospitalaria. Esta ley no se aplica a los ancianos y desempleados, ellos reciben medicamentos de forma gratuita.

El derecho a elegir un médico es bastante limitado. Los españoles tienen que ser atendidos por uno de los médicos de cabecera, según su lugar de residencia. Este médico, si es necesario, lo deriva a un especialista específico específico o para exámenes adicionales en una institución específica. Esto crea el problema de las largas filas de espera para recibir atención médica. El problema de esperar en la fila existe en todo el país, aunque la duración de la espera varía ligeramente en las diferentes regiones. Además, la formación de las llamadas «listas de espera» está influenciada por la escasez de personal y equipos modernos. El número de trabajadores sanitarios per cápita es significativamente menor que en otros países europeos.

Si lo desea, los españoles por su propia cuenta pueden (además del seguro estatal obligatorio) obtener una póliza de seguro en estructuras privadas. El seguro médico privado amplía la elección del médico tratante y minimiza el tiempo de espera para recibir servicios médicos. Las instituciones médicas privadas se distinguen por un alto nivel de profesionalismo y, a menudo, cuentan con el mejor equipo médico.

En el sistema estatal de salud, la asistencia a la rehabilitación, la atención en la etapa de recuperación y la atención a los pacientes críticamente enfermos están poco desarrolladas. Los españoles prácticamente no pueden utilizar los servicios de los sanatorios públicos, hospicios o residencias de ancianos, debido al número limitado de estas instituciones.

El salario de los médicos no depende del trabajo realizado, es decir, de los servicios prestados. El salario de los médicos se calcula sobre la base de la experiencia médica y los títulos profesionales. El nivel de profesionalismo y los comentarios de los pacientes no importan.

En general, los residentes en España están satisfechos con su sistema sanitario. Lo único que, en opinión de la población, requiere revisión: el derecho a elegir el médico tratante y la institución médica, así como el problema existente de las colas.