
Ewa Kopacz, ministra de Salud de Polonia, ha renunciado a la compra masiva de Tamiflu y de vacunas en la epidemia de la gripe. La oposición la acusa de «jugar con la salud de la población» pero la ministra resiste las presiones, explica públicamente el riesgo-beneficio de su decisión y promueve un debate ante la ciudadanía. Un ejercicio de responsabilidad del que deberían de tomar ejemplo nuestras autoridades sanitarias. Información de Pharmacritique.
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